Arquitectos: Amunátegui Arquitectos @amunateguiarquitectos https://www.linkedin.com/in/sergio-amunategui-1374a111/
Arquitecto Colaborador: Jaime Machuca
Ubicación: Pudahuel, Santiago
Productos: Tejuela Antigua aluminio Milfinish, Maceteros Geoclad Aluminio
Se propone un abordar el espacio de la Plaza Central como un sistema de elementos de representación de la naturaleza en la metrópolis. La idea de un parque cuyas distintas funciones y eventos disponen de un momento de pausa o buffer de la actividad urbana, se plasma en este sector central del terminal de pasajeros, donde una serie de tres momentos disponen un espacio de pausa luego de los distintos procesos de embarque.
El primer momento recibe a los pasajeros con la Imagen País en un corpóreo blanco rodeado de la vegetación del valle central en recipientes metálicos. El contraste de texturas y formas artificiales y orgánicas busca aproximar a los pasajeros a la idea de la plaza como una representación de la naturaleza en la ciudad.
Dos pantallas curvas enfrentadas, envueltas en una piel de escamas de aluminio (Teja Antigua Hunter Douglas ) proponen una última experiencia inmersiva en el paisaje del país. La proyección de paisajes fundamentales de Chile dispondrá de un momento envolvente, para que los pasajeros puedan despedirse de los lugares que visitaron, llevarse un último recuerdo y compartirlo en sus redes sociales.
Un follaje artificial que remite al espacio de refugio y sombra bajo el arbolado urbano, o a los bosquetes de plazas y parques, se propone como un tercer momento, bajando la escala del espacio con un cielo de lamas y rayos de luz que media entre el pasajero y la gran altura del hall.
El elemento que une estas tres instancias el paisajismo dispuesto en grupos de contenedores metálicos ( GeoClad Hunter Douglas) con especies, colores y texturas de la condición esclerófila del valle central,
La planta general de la plaza reporta la conjunción de momentos y elementos distintos y diversos, pero con un relato común. Experiencias, espacios de pausa, circulaciones libres y actividades complementarias ofrecen al pasajero un espacio buffer, disociado del continuo de procesos de embarque, para ejercer su autodeterminación respecto del estos: ubicarse, esperar, organizarse y continuar el viaje, todo ello en una última alternativa de contacto con el paisaje del país.